La tarjeta de crédito es un medio de pago y de financiación, que da la posibilidad de poder realizar pagos a crédito aunque no tengamos un dinero en cuenta. En este caso, la tarjeta tiene un límite asignado, el que nos ha concedido el banco. Las tarjetas de crédito son aquellas tarjetas en que el total de las compras realizadas durante un periodo de tiempo (normalmente un mes) se pagan en un solo recibo una vez terminado ese periodo. El límite de crédito en las tarjetas viene asignado por los departamentos de riesgos de las entidades financieras, en función de los ingresos de cada titular. Una vez llegado al límite de la tarjeta, ya no se podrán realizar más pagos ni reintegros en cajeros hasta que empiece el siguiente periodo (normalmente hasta el mes siguiente). En muchos casos éstas tarjetas ofrecen la opción de aplazar o fraccionar los pagos, ya sea de una compra en concreto o del total gastado ese mes.
Conoce todas las tarjetas de crédito que ofrecen los bancos desde Visa a MasterCard. Compara online sus condiciones y solicita la mejor para ti. Lo acuerdo entre Galp Energia España y Bankia permite que todos los usuarios de tarjetas de crédito de esta entidad bancaria se beneficiarán de un descuento de un 2% en las compras que realicen en todas las Estaciones de Servicio Galp de España Adheridas.
Ésta función acostumbra a tener un interés vinculado por el aplazamiento de los pagos. La operativa que permiten las tarjetas de crédito es la siguiente: • Pagar en comercios en todo el mundo. • Pagar por Internet.
• Sacar dinero a crédito en cualquier cajero del mundo. • Realizar traspaso de saldo de la tarjeta a la cuenta. • Realizar transferencias y traspasos. • Pagar recibos. • Hacer ingresos en la cuenta a través de cajeros automáticos.
• Aplazar los pagos realizados. • Consultar saldos de cuentas y disponible de las tarjetas. • Realizar reservas en hoteles, viajes, alquiler de vehículos La utilización de este tipo de tarjetas, requiere un control por parte del usuario o titular, en primer lugar para no agotar o sobrepasar el límite, así como tener la previsión de que en la cuenta donde se carga la tarjeta, existan fondos suficientes en la fecha de pago. Y en segundo lugar, si se utiliza al aplazamiento de pago, por el alto costo de los intereses que aplican los bancos. Las compras con las tarjetas de débito afectan directamente al saldo que tengamos en la cuenta asociada.
Está claro que como usuarios cuando buscamos la mejor oferta de tarjeta de crédito o débito una de las cuestiones fundamentales para otorgar este título de. Información para contratar la tarjeta de crédito de Bankia, configurable con pago a fin de mes o pago a crédito a elegir entre el 5%, el 10%, el 25% o el 50% del.
En cambio las tarjetas de crédito permiten aplazar el pago de las compras hasta un límite acordado. Son un medio para financiar las compras, a cambio normalmente del cobro de un tipo de interés por parte de la entidad. Por este motivo, antes de conceder una tarjeta de crédito, la entidad realiza un estudio de solvencia del solicitante, para comprobar si podrá hacer frente a la devolución del importe adelantado. Para conseguir una tarjeta de crédito es necesario que la entidad estudie antes tu perfil de riesgo. Este estudio es muy similar al que realizan antes de conceder un préstamo personal y revisa las siguientes variables: • Ingresos: la entidad te exigirá la última nómina (si eres un asalariado) o las declaraciones trimestrales del IVA e IRPF (si eres autónomo).
También exigirá la última declaración de renta. • Historial crediticio: el banco estudiará el historial crediticio que hayas tenido y si tienes otros préstamos o créditos. El banco suele consultarlo en el, Centro de Información de Riesgos del Banco de España. • Morosidad: la entidad también consultará los ficheros de morosos (ASNEF, RAI.) para ver si el solicitante figura en uno de ellos. • Crédito asociado al riesgo: el límite de la tarjeta de crédito viene asignado por la entidad financiera y se fija en función de los ingresos del cliente. Por otra parte, algunas entidades exigen como requisito indispensable para conceder una tarjeta de crédito la apertura de una cuenta corriente.
Otras, sin embargo, ofrecen sus tarjetas de crédito independientemente de la procedencia de la cuenta bancaria asociada. Cada vez son más entidades que permiten solicitar tarjetas de crédito a través de sus servicios de banca online. Una tarjeta de crédito suele llegar entre 10 días y un mes después de haber realizado su solicitud. Este periodo es normalmente más largo que el caso de una tarjeta de débito porque requiere un estudio previo del departamento de riesgos y la correspondiente documentación exigida que en principio es: la última nómina (en el caso de asalariados) o las declaraciones trimestrales del IVA y del IRPF (en el caso de autónomos) y la última declaración de renta. En una tarjeta de crédito podemos encontrar las siguientes comisiones: • Cuota de alta: se paga en el momento de dar de alta la tarjeta y el importe oscila normalmente entre 0 y 80€. • Cuota de renovación: es la comisión de mantenimiento que se paga anualmente a partir del segundo año desde su contratación. El importe de esta comisión suele ser entre 0 y 80€.
• Comisión por disposición de efectivo en cajeros: • En cajeros de la propia red: normalmente la entidad no cobra comisión. • En cajeros de la misma red de cajeros: suele aplicarse de un 3,00% a 5,00% sobre el importe retirado. • En cajeros de otra entidad de otra red de cajeros: los bancos suelen cobrar entre 2,50€ y 4€.
• Consultar saldo y movimientos: • En cajeros de la propia entidad: normalmente la entidad no cobra comisión. • En cajeros de otra entidad en la misma red de cajeros: el importe que se aplica no suele superar 1 euro. • En cajeros de otra entidad de otra red de cajeros: el importe que se aplica no suele superar 1 euro. • Duplicado de tarjetas: el importe que suelen cobrar las entidades por un duplicado suele ser entre 3 y 5€. • Cuota de tarjeta adicional: la comisión por tener una tarjeta adicional no suele superar los 35 euros. • Comisión por reclamación de posiciones deudoras vencidas: esta comisión la cobra el banco cuando el cliente no paga una cuota de la tarjeta. Su importe no suele superar los 39€.
Si te retrasas en los pagos periódicos o en la devolución del crédito, tendrás que hacer frente al pago de los intereses de demora, que suelen ser superiores al 20% TAE. Además, la entidad financiera le cobrará también la comisión por reclamación de posiciones deudoras, una comisión que puede llegar a ser de hasta 39 euros. El importe de estas comisiones queda recogido en el contrato de la tarjeta.
Por otro lado, si la situación de impago de la tarjeta persiste durante un tiempo, la entidad intentará recuperar su dinero y para ello podrá solicitar el embargo de bienes. La renovación de cualquier tarjeta de crédito suele ser automática cuando llega su fecha de vencimiento.
Salvo que exista comunicación expresa del titular de la tarjeta de crédito al banco, este procederá uno o dos meses antes de la fecha de caducidad a remitir al titular la nueva tarjeta con una nueva fecha de caducidad. Para anular una tarjeta de crédito, deberás acudir a una de las sucursales de la entidad.
Normalmente la entidad solicita la devolución de la propia tarjeta, que debe destruir en el momento de la entrega. Antes de anularla deberás revisar que la tarjeta de crédito no tenga ningún saldo dispuesto pendiente de cobro. El titular de una tarjeta de crédito, puede solicitar en cualquier momento un aumento del límite de la misma.
Este aumento puede ser “temporal” o “permanente” y siempre está condicionado a la autorización previa por parte del banco. Los aumentos de límite temporales, responden a una necesidad puntual de disponer de mayor límite de crédito en la tarjeta (viajes al extranjero, compras extraordinarias.). El banco autoriza el aumento temporal durante un periodo determinado de tiempo, normalmente entre uno y tres meses. Transcurrido este tiempo la tarjeta recupera el límite que tenía anteriormente. La concesión de estos aumentos temporales, suele ser instantánea, siendo el único requisito, que el titular esté al corriente de los pagos de la propia tarjeta. El aumento de límite permanente, en función del importe de aumento solicitado, normalmente requerirá de un estudio previo del departamento de riesgos del banco, que podrá o no requerir actualizar la documentación solicitada en su día cuando se autorizó la tarjeta. Los riesgos de las tarjetas de crédito son los cargos en compras y disposición de dinero en efectivo sin que el titular de la tarjeta tenga ningún conocimiento de ello.
También están los fraudes a través de Internet. Es muy importante contactar con la entidad al primer indicio de robo o pérdida. Normalmente las entidades suelen tener a disposición de sus clientes un número de atención al cliente disponible las 24 horas del día para responder a este tipo de solicitudes. También puedes llamar al teléfono del emisor de tu tarjeta, a continuación tienes sus números: •: 900 991 124 •: 900 971 231 •: 900 814 500 También puedes visitar en CrediMarket el apartado 'atención a clientes' disponible en cada entidad, que incluye los teléfonos y servicios online de asistencia en cado de robo de la tarjeta. Una vez realizado el aviso por teléfono, quedarás libre de responsabilidad sobre el uso de tu tarjeta de crédito.
Así que a partir de ese momento no te afectará ninguna de las consecuencias producidas por el uso fraudulento con tu tarjeta. Antes del aviso, deberás soportar hasta un máximo de 150 euros las perdidas por operaciones no autorizadas con tu tarjeta. Por eso es tan importante avisar cuanto antes a la entidad. Una vez tengas conocimiento del robo o perdida de tu tarjeta es recomendable también presentar una denuncia en una comisaría o juzgado, enviar una carta a la entidad para comunicar de una manera más formal el robo o extravío de la tarjeta y comprobar las operaciones adeudadas en la cuenta. Además, en el caso de que se le haya cargado una operación no autorizada, es conveniente comunicarlo a la entidad para que procedan al reembolso del importe.